¿Quieres reducir tu consumo de lácteos pero no te resistes a los quesos? Nunca antes fue tan fácil y sabroso. Prueba esta receta que cambiarán tu vida y tus ideas de la cocina vegana, ¡te encantará!
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Esta receta ofrece una gran cantidad de nutrientes y sabores que pueden sustituir al queso lácteo en varios de sus acostumbrados usos. Este es perfecto para untar y botanear con galletas integrales, tostadas de maíz o acompañarlo con uvas, palitos de apio, zanahoria y pepino.
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Necesitas:
Coloca las almendras en un tazón de agua a temperatura ambiente y déjalas en remojo por 24 horas, después de este tiempo tira el agua y enjuaga las almendras.
En la licuadora a potencia alta mezcla las almendras, el jugo de limón, el aceite de oliva (las tres cucharadas), el ajo, la sal y el agua. Licua perfectamente hasta que esté muy cremoso, de 5 a 7 minutos.
Sobre un colador, coloca tres capas de gasa o manta de cielo y vierte la mezcla de queso en ella. Presiona con las manos para eliminar el exceso de líquido y haz un nudo en la tela para dejarlo reposar toda la noche o por lo menos 8 horas sobre el colador para que siga escurriendo.
Precalienta el horno a 93℃, pon la mezcla en un molde engrasado y hornea durante 40-50 minutos hasta que la parte superior se sienta firme y seca.
Desmolda en un plato y agrega las dos cucharadas de aceite de oliva y las hierbas frescas. Otra buena opción es albahaca. También puedes intentarlo con otras nueces, por ejemplo, la nuez de la India aporta una buena acidez en esta preparación.
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