La rutina para el cuidado de la piel implica el uso de exfoliantes que ayudan a eliminar impurezas y células muertas, además de que previenen el envejecimiento, activan la circulación y favorecen la oxigenación de la piel. 

Si prefieres las alternativas naturales para evitar el uso de cremas y mascarillas que contienen químicos que podrían ser dañinos para tu piel, checa las siguientes opciones de exfoliantes naturales que puedes preparar en casa.

Leche y avena

Mezcla 2 cucharadas de leche en polvo, 1/2 taza de avena molida y 1 cucharadita de fécula de maíz, y agrega un poco de agua para formar una pasta. Deja reposar la mezcla durante 1 minuto y aplícala en cara y cuello con un masaje suave. Enjuaga con agua templada.

Linaza y miel

Este exfoliante es recomendable para quienes tienen resequedad en codos y rodillas. Para prepararlo, mezcla 4 cucharadas de miel con 2 cucharadas de agua tibia y 1 cucharada de linaza molida. Revuelve hasta formar una pasta y ponla en el refrigerador durante 3 horas. Frota tus codos y rodillas con la pasta y déjala actuar por 3 minutos, luego enjuaga bien con agua templada.

Azúcar y limón

Mezcla 2 cucharadas de azúcar con el jugo de 1/2 limón. Lava tu cara y, con la piel aún húmeda, aplica la mezcla con movimientos circulares. Deja actuar durante 5 minutos y enjuaga con agua tibia.

Azúcar o sal y aceite de oliva

Mezcla 1/4 de taza de azúcar o sal de mar con 3 cucharadas de aceite de oliva. Humedece tu piel y aplícala en todo el cuerpo con un masaje circular antes de bañarte. Esta mezcla es en especial útil para las zonas en las que se han formado callosidades, como las plantas de los pies y los talones, ya que las suaviza.

Cacao y azúcar

Combina 1/2 taza de azúcar, 1/4 de taza de aceite de canola o de semilla de uva y 2 cucharadas de cacao en polvo. Coloca la mezcla en un frasco con tapa (puede durar hasta 4 días mientras esté bien tapado y en un lugar fresco). Cuando te vayas a bañar, humedece la piel, masajea tu cuerpo con el exfoliante y enjuágate como de costumbre.