Noviembre 10, 2022
En Occidente apenas estamos escarbando en la superficie del valor y los beneficios de respirar consciente, acto que es parte de todas las técnicas de meditación que existen –o casi todas, hasta ahora no me he topado con alguna que no ponga atención a la respiración aunque sea por unos instantes.
El asunto es que si respirar consciente durante nuestra meditación es súper benéfico, imagina respirar consciente la mayor parte de tu tiempo despierto o TODO el tiempo. Seguro habrá quien dirá: No, eso no se puede, es una función autónoma. Y sí, tendría razón en decir que es una función autónoma pero es influenciable: podemos educarla y podemos educar a nuestro subconsciente para respirar más profundo durante nuestro día. Esto es para llevar más oxígeno a nuestras células, para que dispongan de mucha más energía para hacer todo lo que hacen ya y lo que les pidamos hacer, desde alcanzar la iluminación hasta disfrutar más un pastel de chocolate.
Imagina respirar consciente, profundo, en calma como cuando meditas o haces yoga y llevar esos beneficios fisiológicos, mentales, emocionales y energéticos a la mayor parte de tu día, ya sea en la oficina, manejando en el tráfico, en el salón de clases o en tu casa.
Suena atractivo ¿no? Pues lo único que necesitas es respirar consciente durante tu día. Puedes empezar a hacerlo por un par de minutos cada hora, te puedes poner un post-it en algún lugar para recordarlo o una alerta en tu teléfono y poco a poco aumentar el tiempo, por ejemplo, yo estoy haciendo el hábito de respirar consciente, profundo y calmado por 15 minutos de cada hora despierto que tengo (además de mi práctica de meditación) y los beneficios han sido varios:
· Menos estrés.
· Mayor capacidad de concentración.
· Descongestión de mis vías respiratorias.
· La mente de mono (impaciente) más estable.
· La sensación de mayor bienestar.
· Disminución del diálogo mental tóxico.
· Mejor manejo a través de mis diversos estados emocionales diarios.
Si quieres poner a prueba esta sugerencia , existen muchas técnicas de respiración que puedes usar y que son parte de técnicas de meditación como la respiración de fuego de Tai Chi, el seguimiento a la respiración del Vipassana o la meditación Tumo del Tíbet, también puedes solo respirar profundo y ponerle atención al proceso.
Mientras escribo este artículo estoy haciendo el Método Wim Hof (es la respiración consciente a la que me refería arriba con los 15 minutos) que en esencia es una técnica de respiración muy poderosa y me está funcionando muy bien para lograr los beneficios citados arriba y algunos beneficios más "excéntricos" o "alocados".
Podría hacer más largo este artículo y contarte más de lo que estoy haciendo o podría dirigirte directo a la fuente y eso es lo que haré:
Si quieres conocer el trabajo de Wim Hof y los estudios científicos que lo avalan checa este documental que Vice hizo con él y en esta otra liga puedes conocer más del método y registrarte para un par de clases gratis.
Si lo pones a prueba estaría maravilloso que me compartieras tus resultados en los comentarios.
Nos leemos pronto.