El filósofo británico Alan Watts se enamoró del lejano oriente a temprana edad, de tal forma que el taoísmo, el budismo y la filosofía vedanta tuvieron una fuerte influencia en él. A la edad de 14 años ya escribía artículos en un diario budista de Londres y a los 17 publicó su primer libro sobre budismo zen. Posteriormente publicaría 25 libros más y sus ideas provocarían que millones de personas en el mundo reflexionaran sobre el tiempo, los cambios, la espiritualidad, el sentido de la vida y cómo vivirla. Tú también puedes dejarte inspirar por las ideas de Watts a través de las siguientes frases:
1. “La mejor forma de aclarar el agua turbia es dejarla sola”.
2. “La única manera de entender el cambio es entregarnos a él, movernos con él y unirnos a la danza”.
3. “Este es el verdadero secreto de la vida: estar totalmente involucrado en lo que sea que estés haciendo en el aquí y el ahora. En lugar de llamarle trabajo, date cuenta de que es un juego”.
4. “Me he dado cuenta de que el pasado y el futuro son las verdaderas ilusiones y existen en el presente, que es todo lo que realmente hay”.
5. “Los problemas que se mantienen sin resolver, deben ser siempre considerados como preguntas que se han hecho de la manera incorrecta”.
6. “El significado de la vida es simplemente estar vivo. Es tan básico, tan obvio, tan simple. Sin embargo todos se apresuran y sienten pánico como si fuera necesario lograr algo más allá de ellos”.
7. “La tecnología sólo es destructiva en manos de personas que no se dan cuenta que son uno y el mismo proceso que el universo”.
8. “Lo que en realidad estoy diciendo es que no necesitas nada, porque si te ves a ti mismo de la forma correcta, eres un fenómeno de la naturaleza tan extraordinario como los árboles, las nubes, los patrones en el agua que corre, el parpadear del fuego, la distribución de las estrellas y la forma de una galaxia. Tú eres justamente como todo eso y no hay nada malo contigo”.
9. “No podemos ser más sensibles al placer sin ser más sensibles al dolor”.
10. “Sin nacimiento, sin muerte y sin la transmutación perpetua de todas las formas de vida, el mundo sería estático, carente de ritmo, sin danza, momificado”.
11. “Tratar de definirte a ti mismo, es como tratar de morder tus propios dientes”.
Con información de The Power of Ideas