Durante mucho tiempo, la responsabilidad de la anticoncepción ha recaído principalmente en la mujer. Pero los tiempos cambian y por suerte, ahora ambas partes toman las decisiones sobre su sexualidad. En parte, esto es posible gracias a la aparición de anticonceptivos masculinos y, si bien éstos están en las primeras fases de los ensayos clínicos, diversos investigadores de todo el mundo proponen continuamente nuevas alternativas para que los hombres también se sumen al compromiso de la anticoncepción.

Para hacerlo más atractivo para ellos, algunos científicos han desarrollado opciones divertidas como un anticonceptivo inspirado en la coctelería. Basado en el coctel Galaxy, este anticonceptivo consta de varias capas que impiden el paso de los espermatozoides cuando están por separado, pero al mezclarse por efecto del calor revierten su función.

Investigadores de China publicaron en ACS Nano un estudio que realizaron con este anticonceptivo basado en el coctel Galaxy. Esta bebida está formada por coloridas capas en el vaso, que se mezclan rápidamente al agitar o aplicarle calor. Su nombre se debe a que recuerda a la Vía Láctea por sus colores sobre el cielo nocturno.

El trago inspiró al equipo de Xiaolei Wang para fabricar un anticonceptivo masculino cuyo efecto se pudiera anular con calor. Para ello, inyectaron secuencialmente cuatro capas de diferentes sustancias en los conductos deferentes de ratas. Estos conductos son la "carretera" por la que se transporta el semen desde los testículos hasta la uretra. Si se forma un atasco en ella, el semen no puede liberarse.

La primera capa inyectada fue de hidrogel, que actúa como barrera física para impedir el paso de los espermatozoides. La siguiente fue una capa de nanopartículas de oro, que se calientan al irradiar sobre ellas luz infrarroja cercana. A ésta le sigue otra de ácido etilendiaminotetraacético (EDTA), que descompone el gel y mata al esperma. Finalmente, el conducto se cierra con otra capa de nanopartículas de oro.

Las capas de hidrogel y el EDTA impiden el paso de los espermatozoides, mientras que las del oro se utilizaron como una separación que, además, facilita el calentamiento para revertir el efecto del anticonceptivo. Durante los 2 meses posteriores a la inyección los animales macho utilizados en el estudio no lograron embarazar a las hembras, pero al irradiarlos con infrarrojo las capas calientes se mezclaron y el efecto se revirtió, lo cual permitió la fecundación.

Los primeros resultados han sido muy positivos, pero los autores del estudio son cautelosos al respecto, pues advierten que será necesario comprobar su eficacia en humanos, además de asegurar que los compuestos empleados son seguros.

Con información de Hipertextual