Afortunadamente, cada vez más personas están preocupadas por el impacto ambiental de sus acciones y de los desechos que generan, además de que también ha aumentado el número de personas que han decidido tener un jardín, macetas con plantas dentro de casa o pequeños huertos en casa.
En este escenario, el compostaje es una actividad que beneficia en ambos sentidos. Por un lado, es una forma efectiva de reducir el impacto ambiental al aprovechar buena parte de los desechos orgánicos que generas; y por el otro, es una excelente forma de obtener un fertilizante natural para tus plantas, flores y hortalizas.
Lo mejor es que puedes preparar la composta en casa, lo que sí es que debes seguir ciertas recomendaciones, ya que no todos los desechos orgánicos son aptos para este fin, debido a que algunos pueden afectar la tierra, o bien a que pueden atraer a plagas, como cucarachas y ratas. Los siguientes desechos son los que sí y los que no debes usar al preparar composta.
Una vez que tienes identificados los desechos que sirven para tu composta y los que debes evitar en ella, el siguiente paso es empezar a prepararla. Para ello, necesitarás un bote con tapa y un espacio en el exterior, donde no le dé el sol, para colocarlo.
Luego, deberás separar los ingredientes para tu composta en dos categorías:
Toma tu bote y empieza por agregar una capa de material verde, seguida por una capa de material marrón y otra de tierra. Agrega en ese orden los ingredientes (mantén tu bote siempre tapado y en un lugar donde no le dé el sol); una vez que esté lleno, deberás dejarlo reposar entre 3 y 9 meses.
Al empezar el proceso de descomposición puede ser que huela un poco mal; no te preocupes, pues es algo normal y es parte del proceso de degradacion de los elementos que conformarán tu composta.
Cuando esté lista, tu composta será un material de tono marrón oscuro, también llamado humus. Éste es ya el resultado de la descomposición, y su ventaja ante los desechos orgánicos sencillos es que no se mineraliza tan rápido, por lo que puede proveer de nutrientes a las plantas de manera paulatina. Además, la composta, le proporciona al suelo porosidad y capacidad de retención de agua.
¿Cómo utilizar la composta? Una vez que la composta esté lista, sólo debes colocarla en la tierra de las plantas; cada un poco alrededor de cada una y agrégala en ese espacio. O si apenas vas a empezar a cultivar un jardín o un huerto, esparce la composta por el espacio de tierra que vas a usar y agrega una capa de tierra encima.