Los minerales protegen las células y preservan el buen estado de la piel, los huesos y los dientes. También influyen en la regulación de la presión sanguínea, el flujo de los líquidos, el sistema reproductivo y más. Estas sustancias se encuentran en los alimentos y complementan las necesidades nutrimentales de las personas. Aquí te contamos sobre cada mineral y sobre cómo éste afecta tus funciones diarias.

 

Calcio

Además de fortalecer los huesos, el calcio disminuye problemas de hipertensión, colesterol e insomnio.

 

Cobre

Interviene en la pigmentación de la piel y el cabello y ayuda a la formación de la hemoglobina y los huesos.

 

Cromo

Auxiliar en los problemas de obesidad pues reduce el deseo de ingerir azúcar. También aumenta la quema de calorías durante el ejercicio.

 

Fósforo

La principal función del fósforo es ayudar a la formación de huesos y dientes. Este mineral cumple un papel muy importante para poder utilizar carbohidratos y grasas en el cuerpo y para sintetizar la proteína para el crecimiento, así como para conservar y reparar las células y los tejidos. El fósforo trabaja con las vitaminas del complejo B en sus funciones y también participa en la contracción de músculos, el funcionamiento de los riñones y la regulación de los latidos del corazón.

 

Hierro

Fomenta la producción y liberación de hemoglobina y previene la anemia. Es un regulador del crecimiento y el desarrollo infantil. Previene la fatiga y mantiene un buen color en la piel.

 

Magnesio

Ayuda a combatir la depresión, desarrollar el sistema cardiovascular y, si se combina con calcio, funge como tranquilizante natural.

 

Manganeso

Mejora la memoria y los reflejos musculares. Reduce la irritabilidad y ayuda a eliminar la fatiga.

 

Molibdeno

Interviene en el metabolismo de los carbohidratos y grasas, mejora la utilización del hierro, por lo que ayuda a prevenir la anemia y a mejorar el bienestar en general.

 

Selenio

Es un antioxidante que retarda el envejecimiento y protege contra los efectos de la contaminación ambiental.

 

Silicio

Ayuda en el crecimiento de las uñas, la piel y el cabello. También interviene en la formación de los huesos.

 

Yodo

Provee energía, ayuda al crecimiento y mejora la agilidad mental. Mantiene saludables el cabello, las uñas y la piel.

 

Zinc

Interviene en la formación de óvulos y espermatozoides. Favorece la cicatrización de la piel y ayuda a desaparecer las cicatrices producidas por barros y espinillas. Participa en la formación del ADN y del ARN. Estabiliza las membranas celulares y moviliza la vitamina A.

 

Además de los minerales antes mencionados, es importante incluir en la dieta diaria el consumo de agua simple. El agua es fundamental para la existencia del ser humano. Está presente en gran parte del cuerpo de las personas y no contiene calorías. Interviene en diversos procesos orgánicos como la hidratación del organismo, las síntesis de las grasas y la humectación celular, entre otras.

 

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