Principal

Cómo funciona la ley de atracción, según la neurociencia

Noviembre 11, 2020

Time

Menos de 6 minutos de lectura

¿Qué vas a aprender con esta nota?

  • Check
  • La ley de atracción y su funcionamiento desde la neurociencia

  • Check
  • Cómo aplica esta ley en el funcionamiento cerebral

Seguro has escuchado hablar de la ley de atracción y lo útil que le ha resultado a muchas personas para lograr sus objetivos. Se trata de una ley universal que dice que establecer intenciones positivas puede ayudarte a hacer realidad tus sueños y alcanzar tus metas. Suena como algo muy atractivo, pero ¿será que es demasiado bueno para ser verdad? Esto es lo que opina la neurociencia al respecto.

 

La neurocientífica Tara Swart, autora del libro The Source, afirma que esta ley espiritual realmente funciona desde una perspectiva científica, y se puede aplicar  para manifestar tus deseos más profundos y tus metas más grandiosas.

 

Según Swart, la intención lo es todo. Decidir lo que realmente quieres lograr es el primer paso para manifestarlo. Ella explica que muchas veces las personas se acercan a la ley de la atracción de forma vaga, ya que en realidad no saben bien lo que quieren, así que en ese caso, la ley no funciona. Por eso es tan importante tener muy claro lo que se quiere lograr. 

 

Hacer un ejercicio de reflexión para analizar y decidir lo que se quiere tener o hacer es un paso de suma importancia para empezar a aplicar la ley de atracción. Esto se debe a que, al tener claros tus objetivos, preparas a tu cerebro para que comprenda que lo que quieres es importante y es hora de concentrarse más en ello

 

Una vez que estableces tu intención, tu cerebro se activa en tres sistemas neurológicos: el filtrado selectivo, la atención selectiva y el etiquetado de valores.

 

Filtrado selectivo

Todos los días estás expuesto a tanta información y tantos estímulos tan variados que tu cerebro tiene demasiado que filtrar y procesar, y en ese proceso una gran parte de los datos que tu cerebro recibe son desechados. 

 

Swart explica que el cerebro realiza ese proceso de filtrado a muy corto plazo, de modo que si buscas enfocarte en algo a más largo plazo como formar un hogar, terminar una carrera, tener una relación estable, formar una familia, etcétera, si eso no es realmente relevante para tu próxima semana o mes, el cerebro podría filtrarlo y desecharlo. 

 

Pero al establecer conscientemente tu intención todos los días y mantenerla en tu mente continuamente, evitas que el cerebro la filtre, y así permanece presente y tu mente se enfoca en ella.

 

Atención selectiva

Una vez que tu cerebro tiene clara y presente tu intención, se enfoca en ella y es posible que empieces a notar que aparecen oportunidades y sincronicidades que están alineadas con lo que deseas. 

 

Eso se debe a que cuando tu cerebro se enfoca en la intención que estableciste, comienza a prestar más atención a todo aquello que podría ayudar a materializarla.

 

Etiquetado de valor

Es la forma en que el cerebro toma las cosas a las que ha dirigido su atención y las "etiqueta" en orden de importancia. Aquí hay dos áreas: una es la parte lógica, donde se encuentran los deberes y necesidades básicos, como pagar las cuentas, comprar comida y tener lo necesario para subsistir. La segunda es la parte emocional, donde están aquellas cosas que quieres tener y lograr en la vida, todo aquello que te hace feliz y te da alegría.

 

La especialista explica que en este nivel de los sistemas neurológicos es en el que la gente puede tener ciertas dificultades para priorizar las intenciones, porque el cerebro está preparado para sobrevivir, entonces, está mucho más preocupado por enfocarse en lo básico, en lo que está en el lado lógico, y termina por deshacerse de las cosas que ve como recompensas a largo plazo, que no son imprescindibles para subsistir y que considera como riesgos que sería mejor no correr.

 

Preparar el cerebro para que esté atento a ambos lados, a lo lógico y a lo emocional, requiere práctica. Para hacer que se anime a tomar riesgos saludables puedes comenzar por practicar la gratitud, ya que reemplazar pensamientos negativos, de ansiedad o inseguridad con afirmaciones positivas o mantras es una forma de cultivar la abundancia en tu cerebro.

 

Deseo magnético

Una vez que hayas alineado tu cerebro con tus objetivos, habrás cultivado algo que Swart llama "deseo magnético". Esto sucede cuando tus emociones están realmente alineadas con lo que quieres, pues entonces tu cerebro se llena de emociones positivas que te conducen hacia la abundancia y te mantienen motivado.

 

Una vez que el deseo magnético se activa, es posible que comiences a tomar más acciones, grandes o pequeñas, para invocar tu nueva realidad. Para motivarte en esta parte más activa del proceso de manifestación Swart recomienda comenzar un tablero de acción, que es un complemento del tablero de visión y te ayuda a recordar que debes tomar medidas para aprovechar las oportunidades y sincronicidades que tu cerebro ahora está preparado para notar.

 

Así que, por pequeño que sea, se trata de hacer algo todos los días para avanzar hacia esos objetivos, como establecer contactos o tener citas. Se trata de actuar de acuerdo con tus intenciones y mantener lo que pones en tu tablero.

 

Este es un recordatorio importante de que la ley de la atracción puede funcionar, pero no de la noche a la mañana ni como un método mágico. Lograr tus metas no sólo se trata de desearlas y pensar positivo, también requiere trabajo constante, identificar y aprovechar las oportunidades, correr ciertos riesgos y tener un poco de suerte; y debes tener claro que algunos factores siempre estarán fuera de tu control.

 

Foto de portada: Diego PH / Unsplash


Comment

Up

¿No tienes una cuenta? Registrate aquí

Seacrh