Las comidas densamente calóricas, así como los deliciosos platillos y bebidas de esta época, traen consigo a dos invitados no deseados: la acidez estomacal y el reflujo gastroesofágico. De acuerdo con especialistas, en México al menos 17.5 millones de personas sufren problemas de acidez estomacal y 4.4 millones manifiestan que padecen agruras durante las fiestas de fin de año.
El doctor Nasrullah Manji, gastroenterólogo certificado del Hospital Houston Methodist, explica cómo puedes evitar esta sensación desagradable y disfrutar del cierre de año:
- Evita la ropa ajustada: tu estómago necesita espacio para digerir los alimentos, y la ropa ajustada impide que se vacíe correctamente. Cuando eso sucede, el ácido se acumula y terminas con reflujo.
- No comas grandes porciones: en lugar de tres comidas al día cuya porción puede ser mayor, se recomienda ingerir de cuatro o cinco porciones más pequeñas para que el estómago tenga tiempo de digerir los alimentos.
- Ten cuidado con el alcohol: el alcohol de por sí es ácido, y cuando se digiere, crea aún más ácido en tu estómago. Al agregar una gran cantidad de alcohol a una comida condimentada y grasosa, provocas que el reflujo ácido aparezca.
- Evita las pastillas para el aliento después de la comida: la hierbabuena relaja los músculos entre el estómago y el esófago, lo que puede permitir que el ácido del estómago regrese al esófago.
- Mastica chicle: el chicle estimula la producción de saliva, la cual es neutralizante de ácido. Cuanto más mascas chicle, más saliva produces, y así ayudas a eliminar el ácido del esófago.
- Camina: lo mejor para prevenir el reflujo es una caminata después de las comidas, para ayudar a que los jugos gástricos fluyan correctamente.