Principal

Nadar en la nueva normalidad: ¿es seguro entrar a las albercas?

Julio 03, 2020

Time

4 minutos de lectura

¿Qué vas a aprender con esta nota?

  • Check
  • Recomendaciones para prevenir infecciones en albercas

  • Check
  • La mejor prevención es mantener niveles adecuados de cloro y pH en las albercas

Nadar es una de las actividades físicas más completas. Es refrescante, es divertido y es un ejercicio que hace mucho por ti, aunque no sólo es una cuestión de salud, también es un sinónimo de vacaciones.

 

Las albercas permanecieron cerradas para evitar que se convirtieran en un foco de contagio durante la pandemia, pero al igual que el resto de las actividades, ahora reabren sus puertas bajo todas las recomendaciones de higiene; y entonces, la pregunta que surge es: ¿visitar albercas públicas es seguro? Los gérmenes se pueden encontrar en casi cualquier lugar, incluso en albercas y jacuzzis. Esto significa que la limpieza y el mantenimiento adecuados son esenciales.

 

¿Cómo te puede enfermar el agua de alberca?

Las enfermedades del agua recreativa son infecciones causadas por gérmenes que pueden sobrevivir y/o crecer en piscinas, jacuzzis, océanos, lagos y ríos, así como en el agua de parques acuáticos; las enfermedades se transmiten al tragar o al entrar en contacto con agua que contiene gérmenes.

 

La mayoría de las enfermedades del agua de las albercas o jacuzzis son causadas por la contaminación de ésta, que ocurre cuando alguien que está enfermo ingresa a una. En otros casos, las enfermedades son provocadas cuando los gérmenes que viven naturalmente en el agua crecen a niveles que pueden generar una infección, como las diarreicas, en la piel, en los oídos, respiratorias, etcétera. 

 

La enfermedad más comúnmente reportada es la diarrea, a menudo causada por gérmenes como E. coli, norovirus y Cryptosporidium (también conocido como Crypto). Cuando una persona con una enfermedad diarreica ingresa al agua, toda la piscina puede contaminarse. A su vez, tragar incluso una pequeña cantidad de esta agua contaminada es suficiente para provocar una enfermedad.

 

Si bien esto puede sonar aterrador, el riesgo de contraer una enfermedad acuática recreativa se reduce en gran medida si la alberca se mantiene limpia, además de tener medidas de protección propias.

 

La mejor prevención es mantener niveles adecuados de cloro y pH en las albercas

El mantenimiento adecuado de la piscina es más que simplemente aspirar las hojas, se debe controlar regularmente el nivel de cloro y el pH, especialmente si es pública. Cuando el cloro se mezcla con agua, crea un ácido 'débil' que es ideal para matar muchos tipos de gérmenes. Es por eso por lo que se utiliza cloro como desinfectante en abastecimientos públicos de agua.

 

No obstante, algo para tener en cuenta es que el cloro no mata inmediatamente los gérmenes. Si bien puede matar a la mayoría de las bacterias en menos de 1 minuto, otros gérmenes son más tolerantes al cloro. No hay evidencia de que el virus causante de covid-19 sobreviva en las albercas, pero donde sí puede haber contagios masivos es por la convivencia de muchas personas dentro y fuera de las albercas. Por ello es muy importante continuar con las medidas de sana distancia dentro de las distintas instalaciones.

 

Recomendaciones para prevención de infecciones

  • Asegúrate de que la alberca se limpie regularmente y se mantenga adecuadamente. Si eres propietario de una, asegúrate de controlar el nivel de cloro y el pH. Si utilizas un lugar público, solicita los puntajes de inspección.
  • No nades ni entres al agua si estás enfermo.
  • Toma una ducha rápida antes de nadar. Es tentador pensar en una piscina como un baño, pero incluso un enjuague rápido antes de meterse a nadar puede reducir la cantidad de suciedad y sudor que se lleva al agua, lo que a su vez puede ayudar a mantener los niveles adecuados de cloro.
  • Sécate las orejas cuando salgas, para evitar infecciones del oído que se producen como resultado de dejar agua contaminada en éste. Si tienes antecedentes de infecciones del oído, considera usar un gorro de baño o tapones para los oídos.
  • Prepara a los niños. Antes de que sea hora de nadar, recuérdale a los más pequeños que eviten orinar en la alberca o tragar agua.
  • Además, recuerda siempre mantener tu seguridad. Evita resbalones, tropiezos y caídas; supervisa a los niños y que los más pequeños o adultos que no saben nadar usen chalecos salvavidas.

Comment

Up

¿No tienes una cuenta? Registrate aquí

Seacrh