Se habla poco de la importancia de la higiene femenina siendo que la zona íntima es una parte del cuerpo especialmente vulnerable a las infecciones. Toma en cuenta estos tips para mejorar tu cuidado personal:
¿Cómo y con qué lavarse?
- Lo ideal es utilizar un shampoo especializado con un pH adecuado a tu cuerpo que no te reseque ni te irrite. Existen marcas, como Lactacyd®, especialmente diseñadas para tu higiene íntima.
- Evita desodorantes y duchas vaginales. Lo mejor es mantener parte de los fluidos naturales de la vagina.
- Recuerda limpiar desde adelante (uretra y vagina) hacia atrás (cerca del ano).
- Es suficiente lavarse una vez al día durante la ducha. Si sientes molestias o estás pasando por tu menstruación, puedes hacerlo más de una vez al día.
- Es importante no exceder la cantidad de veces que lavas tu zona íntima, recuerda que ahí residen fluidos que sirven como protección natural y si te lavas demasiado, podrías producir resequedad y contraer infecciones.
- No es necesario utilizar esponjas para lavar tu zona íntima; lo mejor es evitarlas pues suelen acumular gérmenes. Lávate con las manos limpias.
Otros cuidados
- Durante la menstruación no dejes pasar más de seis horas sin cambiarte la toalla sanitaria, copa menstrual o tampón.
- Si después de tener relaciones sexuales sientes la necesidad de lavarte, hazlo con agua o con shampoo íntimo. Así eliminas el exceso de fluidos o productos como lubricantes, pero no pierdes tu propia protección natural.
- La mejor opción para la ropa interior es el algodón. No olvides cambiar a diario tus prendas.
- Evita la ropa que sea demasiado ajustada. Esto puede provocar irritación y exceso de humedad.
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