Nos fascina la idea de enamorarnos, el proceso que conlleva el fenómeno. Pero permanecer enamorado es otra cosa. En su libro Love Cycles: The Five Essential Stages of Lasting Love, Linda Carroll explora lo que nos hace enamorarnos, lo que nos permite seguir sintiendo amor por un compañero a lo largo del tiempo y especialmente cuando los dos divergen. Los siguientes puntos se aproximan a los fundamentos de una manera refrescante y sencilla:

1. Los seres humanos poseen dos instintos distintos y opuestos: el deseo de fundirse con otro y la necesidad de seguir siendo un individuo. Ambos son vitales. Así como un vínculo entre el bebé y la madre, también los nuevos amantes se sumergen mutuamente. 

2. Algunos amantes tratan de permanecer dentro de la burbuja del amor mientras puedan creando su propia cultura privada. Inventan una lengua propia que nadie más puede entender. Ellos comparten chistes con finales que son graciosos sólo para ellos. Dentro de la seguridad percibida de la burbuja, su fusión se siente a la vez total y eterna.

3. No todo el mundo experimenta el "impulso de fusionarse". Algunas personas nunca lo sienten en absoluto, o disfrutan de un golpe inicial de éxtasis que se disipa rápidamente. Ciertos individuos entran en el amor lentamente, con una amistad que gradualmente conduce a una asociación íntima, que puede o no puede ser condimentada con romance.

4. Es una especie de locura. Los cambios bioquímicos que tienen lugar en los nuevos amantes producen síntomas similares a los de las personas con trastorno obsesivo-compulsivo, incluyendo la pérdida de apetito y el insomnio. 

5. Los nuevos amantes tienen mucho en común con los adictos. La resonancia magnética revela que el núcleo accumbens, la parte del cerebro que se activa en los amantes, es la misma que se ilumina en los cocainómanos y los adictos al juego.

6. Enamorarse es natural. Es fácil, por eso siempre sucede, pero permanecer en ese estado de euforia resulta realmente complejo. El amor duradero es el resultado del trabajo entre dos personas para crear una asociación sólida y duradera a través del tiempo.

7. Se necesitan tres tipos de habilidades para mantener vivo el amor. Debemos fomentar el autoconocimiento, aprender las habilidades de comunicación (como la lucha justa y la autorrevelación adecuada), comprender el lenguaje de amor de nuestra pareja y desarrollar los tipos de atributos que las tradiciones espirituales han enfatizado siempre: generosidad, paciencia y empatía.

Con la práctica, valor y suficiente paciencia podremos encontrarnos de nuevo con la magia que alguna vez sentimos, con las mariposas revoloteando en el estómago, y esta vez no caeremos enamorados; esta oportunidad será un acto de conciencia, de voluntad, un amor más real y duradero.

Con información de Mind Body Green