La obsesión por alguien puede ser una experiencia emocionalmente agotadora y, a menudo, dolorosa. Aunque es común sentirse atraído por alguien, la obsesión puede llevar a una pérdida de autoestima y a un enfoque poco saludable en una sola persona. Aquí te presentamos algunas estrategias para ayudarte a superar esta etapa difícil.
La obsesión a menudo surge de una baja autoestima. Es crucial reconocer tu propio valor y entender que eres digno de amor y respeto, independientemente de cómo te vea la otra persona.
Es común sacrificar aspectos de uno mismo para tratar de hacer que la relación funcione. Sin embargo, esto solo lleva a más dolor y confusión. Cuando una personate ama de verdad, no tienes que sacrificar tu vida para que esté contigo, pues te aceptará como eres y compartirá tus pasiones.
Tus amigos y familiares pueden ofrecer una perspectiva más objetiva sobre tu situación. A menudo, la obsesión nubla nuestro juicio, haciendo difícil ver la realidad de la relación, así que puede resultar benéfico y esclarecedor compartir tu sentir y tu situación con alguien de tu total confianza.
La obsesión puede hacer que descuides otras áreas de tu vida. Reconectar con tus pasiones y objetivos puede ayudarte a redirigir tu energía de manera más positiva, para volver a enfocarte en ti y tu felicidad.
Aunque el enamoramiento nos hace idealizar a las personas, la realidad es que nadie es perfecto. Hacer una lista de las cualidades menos atractivas de la persona que te obsesiona puede ayudarte a verla de una manera más realista.
Eliminar todo tipo de comunicación con la persona puede ser un paso efectivo para dejar de pensar en ella. Si ya tienes claro que no hay interés en ti, lo mejor es poner distancia de por medio.
Aléjate de lugares, objetos o situaciones que te recuerden a esa persona para evitar recaídas en la obsesión.
El acto de escribir puede ser terapéutico y ayudarte a organizar tus pensamientos y sentimientos. Ver plasmado lo que sientes y lo que esa persona provoca en ti te puede ayudar a comprender mejor las cosas, ver la situación con más objetividad y claridad, para así empezar a liberar el apego.
Si encuentras que es especialmente difícil dejar de pensar en alguien, considera buscar el consejo de un profesional de la salud mental.
Enfócate en relaciones que te hagan sentir seguro y valorado, en lugar de perseguir a alguien que no muestra interés en ti. Además, es importante que trabajes en tu propia felicidad; ten presente que, con o sin pareja, eres una persona completa y puedes disfrutar de tu propia compañía, haciendo de la soledad una aliada.
La obsesión es una experiencia emocional intensa que puede ser perjudicial para tu bienestar. Al seguir estos pasos, puedes redirigir tu enfoque hacia un amor más saludable y una mejor autoestima.