Cuando hay uno o más perros en tu vida, lo más seguro es que tus días se vuelvan mucho mejores cuando llegas y esos seres peludos te reciben llenos de alegría y con un gran derroche de amor y emoción.

Y es que convivir con un can conlleva todo tipo de beneficios sorprendentes: los estudios demuestran que pasear al perro se correlaciona con una mayor felicidad para él y para su dueño, así como una mejor salud física para ambos al mantenerse activos; además de que la compañía perruna logra animar a sus amigos humanos en momentos de tristeza, preocupación o angustia. 

Pero quizá el mayor beneficio de todos es la relación amorosa que construyes con tu mascota. Y ahora existen más razones para creer que ese amor es mutuo.

Es muy probable que en distintos momentos tu perro coloque una o ambas patitas sobre tus piernas, en tu brazo o alguna otra parte de tu cuerpo. Esto puede ocurrir cuando te saludan al llegar a casa, cuando estás sentado y de pronto llegan a colocarse a tu lado, cuando lo acaricias, o en cualquier momento en el que parecieran querer atraer tu atención. 

Si bien a veces este comportamiento se pasa por alto al considerarlo algo cotidiano e irrelevante, la realidad es que ese gesto es una forma en la que tu perro trata de comunicarse contigo. Y su significado es realmente dulce, pues si tu perro te pone la pata encima, puede ser su forma de decir "te amo".

Así como tú le demuestras a tu can que lo quieres al acariciarlo, ellos hacen lo mismo a su manera: al poner su pata sobre ti mientras lo acaricias, él extiende aún más el contacto y el cariño recíproco.

Y, según el contexto, tu perro también puede hacer esto porque quiere que le prestes atención, ya sea para jugar con él, porque ya quiere comer o simplemente necesita que le des un poco de afecto. 

Tú conoces bien a tu perro, así que en cada situación sabrás interpretar sus señales para saber qué quiere o necesita. Para comprenderlo mejor, es importante prestar atención a todo su lenguaje corporal. 

Por ejemplo, si ambos están relajados en el sillón mientras tú le rascas la pancita, lo más probable es que si coloca su patita en ti es como una muestra de cariño recíproca; pero si al tocarte muestra signos de ansiedad, como jadeos, bostezos y orejas agachadas, podría significar que se siente inseguro y busca tu afecto. 

Si notas que tu perro tiene este comportamiento cuando quiere comer, no le des alimento cada vez que te pida, o podrías sobrealimentarlo y hacer que suba de peso. Lo ideal es establecer horarios fijos para la comida. Si tu can come dos o tres veces al día, divide su porción diaria en las partes correspondientes, no le des una porción en cada comida.

Así que la próxima vez que tu perro te ponga la pata para decir "te amo", no lo ignores y dale todo el amor que se merece.