Cocinar tu comida en casa tiene grandes beneficios, como el ahorro y la posibilidad de preparar alimentos más saludables que los que puedes encontrar en la calle. Por eso, es importante que los utensilios con los que cocinas se mantengan en buen estado. Aquí hay cinco tips para lograrlo.

Cuchillos

La parte más importante de los cuchillos es su filo, por lo que es importante darles un mantenimiento continuo. Afilarlos es sencillo y para hacerlo necesitas tener en tu cocina un afilador, una chaira de acero o cerámica o una piedra afiladora. Al pasar la hoja del cuchillo por su superficie, éste se afila de nuevo. Así extiendes su vida útil. 

Ollas y sartenes de acero inoxidable

Cuando adquieras un nuevo sartén u olla de acero, es importante que los laves con agua tibia y jabón antes de usarlos por primera vez. 

Para su limpieza procura no usar fibras ni estropajos de metal, sino una esponja o un cepillo de cerdas suaves, para mantener su superficie libre de rayones. Tampoco uses cucharas o espátulas de metal al manejar los alimentos, pues también podrían dejar marcas. 

Si se te quema algo, coloca agua en la olla y ponla a que hierva durante 10 minutos. Deja que se entibie y lava normalmente. Y para evitar las manchas blancas, pon a hervir un chorrito de vinagre con agua durante unos minutos, y después lava como acostumbras.

Ollas y sartenes de hierro

Antes de cocinar en ellos, cubre su superficie interna con una ligera capa del aceite vegetal de tu preferencia, el cual debes aplicar con ayuda de una servilleta para extenderlo bien.

Nunca los laves con jabón, ya que resulta abrasivo y daña la protección que trae la olla. Para su limpieza, utiliza un cepillo de cerdas duras y agua caliente. 

Si tiene demasiada suciedad o restos de comida incrustados, agrega un poco de sal de grano para que te ayude a limpiarlo. Seca muy bien antes de guardarlo y vuelve a aplicar una fina capa de aceite vegetal.

Moldes de silicona

Antes de su primer uso, lávalos con agua tibia y jabón. Después de secarlos, aplica en su superficie interna una fina capa de aceite, igual que con los utensilios de hierro. Sólo que en este caso, sólo se aplica una vez, antes de su primer uso.

Después de usarlos, lávalos con ayuda de una esponja y jabón suave y sécalos con un paño de microfibra.

Utensilios de madera

Estos deben lavarse inmediatamente después de su uso, con una esponja suave. Es necesario dejar que se sequen muy bien para evitar que la humedad penetre, pues ésta podría ocasionar la aparición de hongos que provocarían daños irreversibles y que incluso podrían perjudicar tu salud. Por esta misma razón, no se deben dejar en remojo. 

En caso de que tengan manchas, el limón será tu mejor aliado. Pasa la mitad de un limón por su superficie y deja actuar unos minutos, para después lavarlos con agua tibia. 

Si se resecan y se les hacen grietas, puedes colocarles una fina capa de aceite de oliva para hidratarlos.

Y tú, ¿cómo cuidas tus utensilios de cocina? Comparte tus consejos en los comentarios.