Hoy en día somos muchas las personas que conocemos la diabetes tipo 2. De hecho, tal vez varios podemos pensar en algún familiar con este padecimiento. La diabetes tipo 2 es una condición metabólica crónica que se manifiesta cada vez más y las cifras a nivel mundial son realmente alarmantes. La diabetes tipo 2 –a diferencia de la tipo 1 que puede ser un trastorno autoinmunitario– tiende a desarrollarse lentamente con el tiempo y se vincula con hábitos alimenticios y de estilo de vida poco saludables. Por ejemplo, la mayoría de las personas tienen sobrepeso o son obesas en el momento del diagnóstico. Y es que el aumento de la grasa dificulta el uso de la insulina de forma correcta para el cuerpo.
Durante la 4ª Cumbre Global del Yoghurt –realizada en San Diego, California, en abril de este año– se planteó este problema para poder proponer soluciones y reducir la presencia de esta condición. Tuve la fortuna de asistir al evento, y quisiera compartirles un poco de lo visto ahí.
De acuerdo con los datos presentados en el evento, la diabetes tipo 2 se puede prevenir o retrasar mediante algunas medidas como las siguientes:
Consumo de yoghurt
El Dr. Jordi Salas-Salvadó de la Facultad de Medicina y Ciencias de la Salud de Reus de la Universitat Rovira i Virgili de España, revisó los resultados de recientes estudios epidemiológicos sobre la asociación entre el consumo de yoghurt y el riesgo de desarrollar diabetes tipo 2 y concluyó que existe una clara evidencia que asocia el consumo de yoghurt con un menor riesgo de presentar diabetes tipo 2.
Control del peso
De acuerdo con la Dra. Li Wen, la microbiota juega un papel sumamente importante en la prevención de la diabetes tipo 2. La profesora de Yale University, especializada en Inmunología y Enfermedades Infecciosas en la Universidad Capital de Medicina de Beijing, China, comentó que la dieta influye en la microbiota intestinal y que esto tiene consecuencias sobre el metabolismo; para entrar en el tema, presentó los resultados de estudios específicos sobre la microbiota intestinal y las poblaciones inmunes, realizado con pacientes con obesidad que tuvieran o no diabetes. La conclusión fue que existe una relación entre la dieta, la microbiota y el desarrollo de la obesidad, lo cual es un factor de riesgo para la diabetes tipo dos. Hacer ejercicio y llevar una alimentación saludable puede reducir considerablemente este factor.
Cambios en la educación
Siguiendo con el programa de la 4ª Cumbre Global del Yoghurt, la educadora en diabetes Constanza Brown-Riggs mencionó la importancia de la alimentación y la educación en el tratamiento y la prevención de la diabetes tipo 2. Para ella, un cambio importante en la educación es fomentar el consumo de productos saludables para la prevención de la diabetes y el control del peso.
La frecuencia en la presencia de diabetes tipo 2 sin duda es una señal alarmante de problemas de salud a nivel mundial. Recordemos que llevar un estilo de vida saludable, que incluya una alimentación balanceada y ejercicio diario, puede reducir considerablemente los factores de riesgo y mejorar la condición de salud del humano en nuestros días. Si en tu familia hay antecedentes de diabetes, podrías contribuir a prevenirla cuidando tus hábitos.