El verano marca la llegada de uno de las frutas más esperadas del año; las cerezas del noroeste. Esta fruta es ideal para añadir un toque de frescura a la alimentación y un impulso a tu salud. Son deliciosas y a todos les encanta, así que prepárate y busca este delicioso fruto que empezarás a ver en el mercado.

En México se producen cerezas en Puebla y Chihuahua que tenemos disponibles para el invierno, pero estas que se producen en el noroeste de Estados Unidos son las que podemos disfrutar durante el verano. 

¿Por qué son el complemento perfecto para el verano?

Las cerezas del noroeste no sólo son un capricho estacional; también ofrecen beneficios específicos que enriquecen nuestro bienestar durante los meses más cálidos del año. Estos son algunos de los beneficios de consumir este delicioso e irresistible fruto:

- Fuente de hidratación: Con un alto contenido de agua, las cerezas son una excelente opción para mantenerte hidratado y equilibrado, previniendo la deshidratación en los días de calor.

- Facilitadoras del sueño: Gracias a su aporte de melatonina, estas frutas contribuyen a regular nuestro ciclo de sueño, que ofrece un descanso reparador incluso en las noches más cortas del verano.

- Aliadas contra la inflamación: Sus flavonoides naturales ayudan a reducir la inflamación y el dolor muscular, siendo un recurso valioso para quienes disfrutan de actividades físicas al aire libre durante esta temporada.

Las cerezas también son un auténtico tesoro nutricional que aporta buenas dosis de vitaminas C, A y K, minerales (potasio, magnesio, hierro, calcio), fibra y ácido fólico. Aunque si por algo destaca, es por sus propiedades antioxidantes y antinflamatorias que la convierten en un alimento benéfico para la salud.

También es una fruta pobre en grasas, proteínas y colesterol, rica en fibra e hidratos de carbono y con un aporte calórico medio, de 59 calorías por cada 100 gramos.

¡No te pierdas esta corta temporada de cerezas e inclúyelas en tu dieta!