Aunque actualmente hay menos desabasto de desinfectante para manos en las farmacias, no cabe duda de que muchos de ellos siguen con precios bastante altos y realmente no sabes si son confiables. 

El desinfectante de manos hecho por ti mismo puede ser la mejor opción, si lo que buscas es que tenga los ingredientes necesarios para en verdad proteger tus manos de bacterias; aunque es importante que sepas que aun si utilizaste los materiales indicados, es posible que este desinfectante actúe de distintas maneras en la piel, sobre todo si es una piel sensible. 

Un desinfectante efectivo debe contener al menos un 60% de alcohol, según indica la OMS. Además, debes usar la proporción de 2 a 1, que significa que debes tener un 91% de alcohol para frotar (alcohol de farmacia o isopropílico).

Y aunque suene extraño, se debe aclarar que usar alcohol de vodka u otra bebida alcoholica no sólo es incorrecto sino que al tener niveles de alcohol mucho más bajos al recomendado pone en riesgo tu salud, pues recuerda que también deberás mezclar el alcohol con algún emoliente como glicerina o gel de aloe vera para cuidar tu piel, y si usas otro tipo de alcohol no obtendrás el nivel recomendado para una desinfección adecuada.

Los desinfectantes para manos están destinados a ser utilizados sólo como respaldo cuando no tienes agua y jabón a la mano, pues recuerda que esto es lo que ha recomendado la OMS. Así que cuando tengas tu desinfectante, aplícalo correctamente durante 20 segundos hasta que tus manos se sientan secas. 

Una opción para preparar tu propio gel antibacterial es la siguiente: 

Ingredientes

• 250 ml de alcohol etílico de 96º (1 vaso o 1 taza)
• 7 ml de agua oxigenada (1/2 cucharada)
• 30 ml de agua hervida o destilada (2 cucharadas)
• 5 ml de glicerol o glicerina líquida (1 cucharadita)
• 10 gotas de aceite esencial de árbol del té

Procedimiento

• Añade el alcohol a un recipiente.
• Agrega el agua oxigenada, seguida del agua hervida o destilada, termina con la glicerina y el aceite esencial; mezcla muy bien.
• Vierte con ayuda de un embudo en pequeños recipientes.
• Deja reposar 1 día antes de empezar a usarlo.
• Para usarlo, aplíalo directamente en tus manos y frota bien hasta que seque.