Shakespeare alguna vez dijo con mucha razón que: “el placer y la acción hacen que las horas parezcan cortas”, pero esa es sólo una de las cosas que el placer puede hacer por las mujeres. Quizá no te lo hayan dicho mucho mientras crecías ( o nunca), pero tocarte y sentir placer está perfectamente bien y la voluptuosidad no debe ser motivo de vergüenza ni culpa, sino un portal para descubrir y explorar los secretos de la energía femenina a través del gozo corporal.
Desafortunadamente la sexualidad de las mujeres ha sido objeto de todo tipo de manipulaciones y distorsiones a través de la historia.Sin embargo, explorar tu cuerpo y reconocer el placer que tú misma puedes darte puede ser una forma rápida y precisa para traer a la superficie pensamientos, emociones, traumas y prejuicios con respecto al cuerpo y la sexualidad, de tal manera que estos puedan ser reconocidos y liberados. Ya que la mejor forma de trascenderlos es a través del gozo, pues el placer reaviva nuestro deseo de vivir y nos ancla en nuestro cuerpo brindándonos la estabilidad y la plenitud física, mental y emocional que con tanta frecuencia buscamos.
Así que si te sientes lista para dejar atrás esos patrones que no te permiten disfrutar de una sexualidad sana y plena y liberarte de las ideas y prejuicios sobre la masturbación y la sensualidad, el reto de los 30 días de auto-placer es para ti y es muy sencillo. Básicamente consiste en masturbarte durante 30 días seguidos explorando tu cuerpo de la manera en que prefieras. Puedes simplemente tocarte con los dedos o utilizar algún juguete sexual. Además no sólo tiene que ser 30 días ¡ si quieres puedes hacer muchos más! El punto es que relacionarte con tu cuerpo con libertad y contento durante este periodo de tiempo es capaz de transformar tanto la visión que tienes de ti misma como tu relación con corporalidad.
Muchas mujeres que se han embarcado en esta aventura, han reportado un incremento en su capacidad para sentir placer y disfrutar la vida en general. Además de ayudarles a desarrollar mayor sensibilidad y consciencia de las sensaciones sutiles que emergen mientras se tocan, reconociendo las variaciones en su placer y también aceptando los cambios en su cuerpo.
Abordar este reto también puede ser sumamente beneficioso para aquellas mujeres que no disfrutan realmente el sexo, o que hasta ahora no lo han disfrutado y por lo tanto no se sienten tan interesadas. Lo cual puede ser motivo de tensiones en su relación de pareja y la infelicidad que esto conlleva. La cuestión es que debido a los prejuicios y deformaciones culturales sobre la sexualidad femenina muchas nunca han tenido la oportunidad de experimentar su sexualidad sin que esta esté subordinada al placer de otra persona o participar de una visión en la que las relaciones sexuales no sólo están asociadas a la reproducción. Es decir simplemente nunca lo han hecho por el puro gusto de complacerse a si mismas.
Por esta razón, lo más importante si decides abordar el reto es que dejes ir por un momento los prejuicios, ideas, miedos y aprensiones, para simplemente estar presente y consciente de tus sensaciones sin la presión de tener que llegar a ningún lado, ni complacer a nadie más. Finalmente tú estás en control, cada sesión de auto-placer empezará y terminará cuando tú lo decidas. Y como vivimos en un mundo en el que el poder de las mujeres se ve mermado constantemente tanto en lugares públicos como privados, recuperar el cuerpo como propio y dejar atrás la incomodidad o la subordinación son por si mismas formas de sanar y recuperar la alegría de vivir.
En palabras de Hipócrates, el padre de la medicina:
“Sanar es una cuestión de tiempo, pero a veces también es una cuestión de oportunidad”. Así que no pierdas la oportunidad de aprovechar este reto de 30 días para establecer, recuperar o profundizar en tu relación con tu cuerpo y experimentar el despertar de tu energía femenina.