La migraña es uno de los padecimientos más frecuentes y molestos a los que cualquier persona en el mundo contemporáneo puede estar expuesta. Hay personas que son más propensas a presentar un cuadro de migraña que otras, incluso bajo los mismos parámetros de estrés y alimentación.

Si eres de los que ya han sufrido migraña aunque sea una vez en la vida, aquí hay una guía rápida para actuar antes, durante y después de un cuadro.

Antes del cuadro (prevención)

- El estrés es uno de los principales desencadenantes. Evita las situaciones constantes de tensión, y sobre todo, evita que se acumulen. La migraña suele ser producto de esas acumulaciones.

- Evita pasar demasiado tiempo frente a la televisión o la computadora.

- Mantén una dieta saludable, con muchas frutas y verduras frescas.

- Toma mucha agua. Mantenerte bien hidratado previene la aparición de cuadros de migraña.

- Mantén una buena “higiene del sueño”, esto es: evita desvelarte o dormir más de 8 horas al día; si tienes problemas para conciliar el sueño o para alcanzar un descanso pleno, intenta ejercicios de respiración y meditación.

- Cuida los estímulos de luz y sonido que recibe tu cuerpo. Los altos decibeles de la música o la radiación que emiten las pantallas, están directamente relacionados a la aparición de migrañas.

Durante el cuadro

- Permanece acostado, con la espalda y la cabeza en un almohadón grande.

- Evita toda fuente de ruido y luz; literalmente, mientras más encerrado, mejor.

- Las aspirinas no surten efecto. Si no tienes ya una medicación por parte de un especialista, un Ketorolaco sublingual y una cápsula de Ibuprofeno ayudan a disminuir el dolor.

- Intenta dormir, y si no puedes, date masaje en el cuello con las yemas de los dedos firmes, mientras permaneces acostado en decúbito dorsal (de lado).

- Masticar hoja de coca o tomar té de coca es un buen remedio contra estos dolores. Se pueden conseguir en tiendas naturistas y de medicina alternativa. También la puedes pedir en servicios por internet.

- La aromaterapia es una gran opción ya que ciertos olores relajan el sistema nervioso central y pueden disminuir la migraña. Tanto en esta opción como en la anterior, conviene prevenir y ya tener estos productos en el botiquín.

Después del cuadro

- Evita los alimentos y bebidas con taninos como el vino tinto, los arándanos, las nueces y las espinacas; también evita el chocolate oscuro, los quesos fuertes y los cacahuates.

- Intenta reconocer qué fue lo que causó tu episodio: estrés acumulado, un estímulo sonoro o visual o un alimento, y toma medidas para evitarlo posteriormente.

- Aunque no lo creas, los medicamentos contra la migraña contienen cafeína, así que no te hará mal una taza de café de vez en cuando.

- Y lo más importante: puedes prevenir episodios de migraña si te mantienes libre de estrés y, cuando es inevitable, lo canalizas hacia actividades que te permitan sacar tu energía.

- Practicar yoga restaurativo te ayudará a evitar la aparición de cuadros, además de otros incontables beneficios para tu calidad de vida; además, recibir masaje especializado en tensión muscular abonará a la prevención.

- Tener una nutrición personalizada, es decir, que un nutriólogo trate tu condición, es un gran método para tratar la migraña. Puedes informarte acerca de la trofología, un método nutricional basado en la acidez de los alimentos. O en la nutrición ayurvédica. 

¿Padeces de migrañas constantes? ¿Qué métodos usas para controlarlas?