La colitis suele provocar malestar en quienes la padecen porque conlleva incomodidad después de comer, inflamación de estómago e intestino, gases, ruidos intestinales, diarrea o estreñimiento. Pero, ¿de qué manera influyen estos síntomas en la vida de las personas?

Por un lado, la vida social se ve afectada pues el interés del paciente por convivir se reduce significativamente. Si una persona está concentrada en un dolor estomacal, por mencionar un ejemplo, encontrará complicado mantener conversaciones o estar activa.

También es importante mencionar que la colitis afecta la percepción que tiene una persona sobre su propio cuerpo y, por lo tanto, su estado de ánimo y la calidad de sus relaciones personales. Si alguien se siente inflamado constantemente, lo más probable es que no sienta deseo por relacionarse con una pareja o en actividades que impliquen movimientos corporales. Incluso su autoestima se puede ver afectada, haciendo de la persona con colitis alguien inseguro. Esta inseguridad puede causar ausentismo laboral y social y por eso es tan importante erradicar este malestar digestivo.

Un estudio del 2002 de Chey y colaboradores reporta que más del 60% de los sujetos con colitis o síndrome de intestino irritable suele presentar malestar después de comer. De este porcentaje, el 28% lo hace 15 minutos después de la comida y el 93% dentro de las primeras tres horas. Dado el alto índice de personas que padecen de este malestar digestivo, la búsqueda de soluciones holísticas para el tratamiento de la colitis, así como la creación de dietas de prevención, han aumentado en los últimos años.