¿Acostumbras poner a tus amigos al tanto de cada detalle de tu vida? Es cierto que la amistad está basada en la confianza y que tus amigos son las mejores personas para compartir todo tipo de temas, pero también es cierto que hay asuntos que sería mejor mantener en privado, como algunos detalles de la relación con tu pareja.

¿Qué temas es adecuado compartir con tus amigos? ¿Cuáles asuntos deberías guardar para ti mismo? ¿Cómo actuar cuando consideras que has cruzado alguna de esas líneas? Todas estas son preguntas difíciles, y la forma en que las respondas podría marcar la diferencia entre un matrimonio saludable y uno no saludable.

De acuerdo con la doctora Claudia Luiz, reconocida psicoanalista y escritora, la línea entre lo personal y lo privado ha cambiado definitivamente, pues ahora las personas en general son más abiertas y tienen menos miedo de hablar sobre lo que es real. 

Sin embargo, la especialista advierte que hay ciertas realidades que se mantienen mejor dentro de la privacidad del matrimonio, sin compartirlas con el exterior. En especial, no es necesario ni sano hablar mal de tu cónyuge con tus amigos, ni compartir demasiado sobre su vida sexual.

Es normal que busques desahogarte con tus amigos cuando surge algún problema con tu pareja, pero debes tener cuidado con la forma en que manejas las cosas al contar tu versión de la situación. 

Procura externar tu sentir cuando el momento de enojo, tristeza, frustración o decepción haya pasado, para que puedas exponerlo de manera más objetiva, sin dejar ver sólo el lado negativo de tu pareja, que en ese instante es el que más resalta para ti, debido a tus emociones.

También es importante que tomes en cuenta si tus amigos son o no la audiencia adecuada para tu queja. Según Luiz, el mejor lugar para desahogarse y buscar soluciones para los conflictos matrimoniales, así como para las emociones que generan los problemas conyugales, es en el consultorio de un terapeuta, no en una charla con amigos.

Por otro lado, la doctora Saudia Twine, terapeuta matrimonial y familiar, afirma que, si bien es común que las personas hablen con sus amigos sobre los desacuerdos con su cónyuge, antes de hacerlo es importante que se pregunten qué buscan al contarlo. 

A veces sólo se busca ser validados por otra persona, saber que están de tu lado, que te dan la razón y apoyan tu postura. Pero a final de cuentas esa validación está de más, pues lo que realmente importa es que tu pareja sea quien conozca y acepte tu punto de vista, y que ambos encuentren el equilibrio en sus posturas, ideas y formas de ser para mejorar la relación.

Para esto, lo mejor es simplemente ser abierto y honesto con tu cónyuge, para que conozca tus sentimientos y opiniones acerca de los problemas que existen entre ustedes. Y en todo caso, si requieres una opinión externa, lo ideal es que ésta sea neutral, y eso sólo lo vas a obtener si consultas con un terapeuta, que les dará un punto de vista imparcial.

Además de los problemas y desacuerdos, un tema recurrente que se trata con los amigos es el aspecto sexual en tu relación. Tanto Luiz como Twine aconsejan que recuerdes que tus historias sexuales también son de tu pareja. 

Al igual que con otras cuestiones matrimoniales, no necesariamente tienes derecho a compartir historias que tu pareja no quisiera compartir. Si lo haces y tus amigos obtienen demasiada información de ti y tu vida privada, tu pareja puede sentirse traicionada. 

Asegúrate de mantener los detalles entre los dos y, antes de hablar, pregúntate cómo te sentirías si fuera tu cónyuge quien habla del tema con sus amigos. Esto te dará la respuesta sobre qué tanto debes compartir y dónde está el límite de lo que debe permanecer privado.

Con información de Fatherly