Es complejo comprender que la mayoría de la gente es incapaz de hacerle frente a la realidad, pero es real. Las personas no pueden relacionarse con sus experiencias de una forma reflexiva y sana, y tampoco tienen la obligación de hacerlo. Sin embargo, ante las experiencias difíciles y traumáticas es necesario que cuiden su salud mental. Existen diversas formas de tratar el fenómeno. Un estudio realizado por investigadores de la Universidad de Manchester en el Reino Unido dice que tener un compañero animal puede ayudarnos de manera importante para sobrellevar de manera saludable nuestros problemas.
1. Afecto y compañía
Los animales domésticos tienen una función importante en nuestras vidas.
Si tienes una mascota, hay alguien que te espera en casa después de un largo día. Algunas mascotas, como los perros, pueden incluso empatizar con tus emociones y expresar lo mucho te quieren con muestras diversas de afecto.
2. Te proporcionan una rutina
La rutina es necesaria para reconocer cómo funcionamos en la realidad: Milo, una mascota hipotética, se despierta temprano para usar el baño, necesita ser alimentado dos veces al día y requiere su paseo diario. Debes saber si eres capaz de cumplir sus necesidades. Reconozcámoslo: una rutina con una mascota puede ser reconfortante para cualquier individuo y tienes alguien con quien hablar si vives solo, aunque te responda con ronroneos o lamidas o canto.
3. Te entrena para saber si eres capaz de cuidar de alguien diferente de ti
Una mascota, además de ser una fuente de apoyo emocional y una distracción linda, te proporciona un entrenamiento que de alguna forma te dota de un propósito, y tener un propósito te hace más feliz. Imagina que un día tienes una familia y que nunca has compartido nada con alguien, simplemente el contexto haría que tu vida diera un vuelco de 180 grados, pero si antes tuviste una mascota seguramente entenderás mucho de la convivencia con otro individuo.
4. Con una mascota seguramente reconocerás tus límites
Tu salud mental básicamente se trata de reconocer tus límites; la empatía, comprensión y paciencia que le guardes a tu mascota será un buen parámetro para medirte. Principalmente porque te enfrentas a una especie con la que no puedes comunicarte oralmente, una especie a la que tienes que dedicarle más tiempo que a una persona, si es que quieres entenderla y convivir con ella. Eso te ayudará a entender a qué estás dispuesto y a qué no. Si logras establecer una relación sana con tu mascota, con base en esfuerzo y dedicación, no sólo te mantendrás ocupado sino que estarás preparado para establecer relaciones sanas con tus congéneres.
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Con información de Curiosity