Lao-Tse fue un pensador chino que creó el taoísmo. La importancia de esta corriente filosófica radica en que propone una moral individual basada en seguir el camino de la naturaleza. Este pensamiento aconseja una línea de política liberal y pacifista, recomendando a las autoridades intervenir lo menos posible en la vida de los pueblos, no agobiarlos con reglamentaciones e impuestos. Las siguientes son cuatro enseñanzas de Lao-Tse que te harán reflexionar sobre cómo vivir la vida:

1. Reverenciar la vida

De acuerdo con las enseñanzas de Lao-Tse, debemos respetar todas las formas de vida. No debemos dominarlas ni controlarlas. El primer paso para lograr este cometido es, según Lao-Tse, amarnos a nosotros mismos. A partir de este amor, el amor a todos los demás seres se extenderá naturalmente. Debemos tratar a los demás con respeto, amabilidad y gratitud. Es la única forma en que todos viviremos en paz y armonía. 

2. Ser sinceros

Tenemos que ser auténticos y honestos. Tenemos que permanecer fieles a lo que realmente somos, sin dejar que las fuerzas externas nos cambien. Una vez que comencemos a aceptar y comprender quiénes somos realmente, comenzaremos a entender lo que una vida feliz implica para nosotros. Según Lao-Tse, cuando seguimos nuestra verdad, todo lo demás caerá en su lugar. Una vez que nuestros pensamientos y acciones se alineen, comenzaremos a conocer el significado de la sinceridad.

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3. Ser amables

Ser amable significa ser amable con toda la vida, sin intereses de por medio; no practicar la bondad basada en deseos egoístas. De esta manera abandonamos la necesidad de tener razón y nos damos cuenta de que la bondad es la virtud más importante que existe. Cuando consideramos las necesidades de otras personas y cedemos en nuestro deseo de manipularlas o controlarlas, vivimos en armonía. Debemos practicar la dulzura para comprender lo que es realmente importante en la vida.

4. Ser solidarios

Esta virtud nos impele a que nos centremos en apoyarnos a nosotros mismos y a los demás, es decir, en ser solidarios. Todos tenemos un viaje difícil en la vida y lo mejor que podemos hacer es ayudarnos mutuamente a tener éxito en ese viaje.

Debemos dar sin esperar algo a cambio. Para Lao-Tse, dar es una cuestión natural, pero olvidamos esto porque en la sociedad impera el que hagamos otras cosas. Sin embargo, cuando volvemos a nuestro estado natural de ayudar a los demás encontramos una vida de verdadero propósito; encontramos, por ejemplo, alegría en facilitarle la vida a otras personas. Lao-Tse nos enseña el camino para tener una vida plena y con sentido, de manera concreta. 

Con información de Hack Spirit