Los padres primerizos suelen estar tan emocionados y nerviosos que acaban por comprar miles de cosas para recibir a su bebé. Sin embargo, muchas de esas compras suelen ser innecesarias, o se utilizan durante muy poco tiempo.

Es importante entender que los recién nacidos tienen necesidades mínimas que deben estar cubiertas, además del amor y el cuidado de sus padres: alimentación, sueño, higiene y seguridad.

Con esto como base y para evitar gastos mayores a los que ya tienes, te decimos qué es lo que más necesita un bebé cuando llega al mundo.

Alimentación

Lo ideal es que los recién nacidos se alimenten exclusivamente de leche materna, al menos durante sus primeros 6 meses de vida. Así que en este momento no necesitas más que ropa cómoda para amamantar y algunas toallas pequeñas para la limpieza.

Para mantener este régimen alimenticio cuando regreses a trabajar, te pueden ser útiles un extractor de leche y unos biberones. Lo recomendable es comprar sólo un par de ellos y ver si resultan cómodos para el bebé, ya que algunos les ocasionan agruras, o simplemente no les agradan. Espera a encontrar el que sea de su agrado y entonces adquiere algunos más. 

Sólo en caso de que el pediatra así lo recomiende, o si por alguna razón te es imposible amamantar a tu pequeño, necesitarás fórmula láctea para sustituir tu leche. Compra la que el médico te recomiende, según lo que tu bebé requiera.

Higiene

Un básico para los bebés desde el momento en que nacen son los pañales y las toallitas húmedas. Si además de cuidarlo a él te preocupa la conservación ambiental, te recomendamos optar por pañales ecológicos, que están fabricados con materiales biodegradables, o los pañales reutilizables hechos de tela, que puedes lavar múltiples ocasiones. Y también puedes encontrar toallitas húmedas biodegradables.

Para bañarlo necesitas jabón y champú especiales para bebé, para evitar que le irriten la piel o los ojos. Para después del baño, compra una crema ligera para humectar su piel y una pomada para aliviar las rozaduras.  

En cuanto a la tina, te recomendamos elegir una convertible, que sirve para bañar al recién nacido con comodidad y seguridad, y se puede adaptar al tamaño de bebés de mayor edad. Para secarlo, es necesario un juego de toallas hechas de algodón.

En cuanto a la limpieza de su boca, no necesitas más que unas gasas para humedecerlas, colocarlas en tu dedo y con ellas limpiar con cuidado sus encías y paladar. 

Para dormir

Para que descanse adecuadamente, el bebé requiere una cuna. Al igual que en el caso de la tina, te sugerimos elegir una que se pueda adaptar a distintas etapas de su crecimiento. Incluso hay algunas que se convierten en camitas individuales. Como complemento, necesitas un par de juegos de cama (para que uno esté limpio mientras lavas el otro). 

Si quieres que se mantenga entretenido mientras está despierto en su cuna, un móvil colgante puede ser de utilidad. Hay algunos que incluyen bocinas para reproducir música relajante que le ayuda a tranquilizarse y conciliar el sueño.

Ropa

Este es el punto en el que los padres primerizos suelen comprar cuanta cosa ven en los aparadores. Sin embargo, por muy lindas que luzcan todas las prendas que verás desfilar ante tus ojos, ten presente que lo principal que necesita un recién nacido son prendas cómodas y fáciles de poner.

Además, no es bueno comprar mucha ropa de recién nacido, ya que comenzará a crecer y pronto dejará de usarla. Normalmente con cinco o seis mudas completas y un par de mantitas es suficiente. Y como tip, procura comprar prendas en colores neutros y variados, que no todo sea rosa ni todo azul.

Cada muda completa incluye:

• Gorro
• Guantes
• Body (de manga corta o larga, según la época en que nazca)
• Mameluco (la tela también depende de la temporada)
• Calcetines 
• Babero o toalla pequeña para limpiar los derrames de leche

Para salir

Ahora que los paseos tendrán un nuevo integrante, es importante pensar en su seguridad y comodidad. Para los viajes en coche, es necesario un asiento de seguridad. Aquí también es recomendable buscar uno que se adapte al crecimiento del pequeño.

Para los paseos a pie, puedes elegir un portabebé tipo cangurera o un fular. Y si el recorrido será más largo, una carriola es la solución.

Como puedes ver, aunque sí necesitas comprar varias cosas cuando se trata de tu primer hijo, no es necesario gastar de más para que tu bebé esté bien. No lo hará más o menos feliz tener mucha ropa o unos zapatitos que sólo usará en sus primeros meses. 

Así que prioriza tus gastos y evita derrochar el dinero en cosas innecesarias. Para ese pequeño ser, lo principal es tener tu amor y atención.