El estrés es una respuesta física y psicológica normal a las exigencias diarias de la vida. El estrés, en pequeñas cantidades, puede motivarte a afrontar los retos del día a día; pero cuando no puedes manejarlo, el estrés puede ser dañino.

Es común que en algún momento de tu vida experimentes sentimientos de tristeza, ansiedad, mal humor, insomnio, dolor de cabeza, gastritis y palpitar acelerado, síntomas asociados al estrés, una enfermedad considerada un trastorno mental cuando provoca comportamientos sociales desajustados y malestar persistente en el tiempo. Es normal sentirlo a veces, pero ¿cómo saber si el estrés te perjudica?

“Creo que algunas de las señales críticas son no ser capaz de hacer actividades importantes, como no poder recordar las citas o el trabajo, o esperar hasta el último momento para hacer cosas importantes, como pagar cuentas, ir al supermercado o atender asuntos familiares”, señala Beth Rush, neuropsicóloga de la Clínica Mayo.

La especialista recomienda considerar hasta dónde llega el estrés. Si estás en el punto en que ya no puedes funcionar adecuadamente, esa podría ser la señal de algo más grave. En ese caso, lo mejor es ir con un médico. “Algo serio podría ocurrir, como ansiedad o depresión, las cuales deben evaluarse y tratarse”.

El estrés es impredecible y para combatirlo es necesario cuidar tu salud en general. “Dormir, comer bien y hacer ejercicio. Busca señales de estrés en ti, controla tus emociones y cuando lo necesites, descansa un poco de la actividad, la estimulación o la interacción en la que estés”, concluye Rush.

La Organización Mundial de la Salud y la Organización Panamericana de la Salud reconocen el estrés como una de las enfermedades del presente más comunes, que por las dimensiones que ha adquirido debe tratarse como un problema de salud pública. Señalan que es prioritario desarrollar entornos laborales saludables, no sólo para lograr la salud de los trabajadores, sino también para hacer un aporte positivo a la productividad, a la motivación laboral, al espíritu y la satisfacción en el trabajo, así como a la calidad de vida en general.

8 formas de combatir el estrés

El médico naturista Pablo Saz recomienda liberarte del estrés a partir de las siguientes actividades:

1. Toma conciencia de la respiración. Expira y exhala a tu ritmo normal, pero hazlo profundamente. 

2. Escápate a la naturaleza. Busca refugio en un bosque, un parque o un jardín. 

3. Pon orden. Un lugar organizado tiene efectos emocionales positivos. El orden revitaliza y aclara la mente.

4. Aliméntate bien. Una dieta equilibrada, rica en frutas y verduras para la estabilidad física y mental.

5. Acepta tu fragilidad. Este es un desencadenante común de la ansiedad y tensión, así que acepta que puede pasarte.

6. Cree en ti. La confianza te permite tener serenidad y equilibrio emocional. 

7. Cambia la perspectiva. Plantea enfoques alternativos que te permitan ver la situación desde otro enfoque.

8. Ríe. Reír es la mejor fórmula para descargar tensión y restaurar el equilibrio.