La alimentación, el estilo de vida actual, las radiaciones, el aire que respiras, todo eso tiene un impacto en tu salud; y si no te desintoxicas, puede ser que a la larga le causes más daño a tu cuerpo. Aquí es donde entra el hígado, uno de los órganos principales que ayudan en el proceso de desintoxicación. Por ello, es sumamente importante que lo mantengas en el mejor estado posible.

Estas son algunas de las funciones del hígado:

• Produce proteína y otros químicos para ayudar a la coagulación de la sangre.
• Produce albúmina para regular el fluido en tu sistema circulatorio.
• Crea carbohidratos que se liberan para después convertir la glucosa en glucógeno, que es almacenado en el hígado y otros músculos como energía.
• Libera triglicéridos y colesterol.
• Almacena vitaminas.
• Produce bilis para mejorar la digestión.

Si tienes alguno de estos síntomas es probable que tu hígado no funcione de la manera óptima, pero recuerda ante todo consultarlo con tu médico:

• Sentirte débil y con mucho cansancio.
• Náuseas y/o vómito.
• Falta de respiración.
• Dolor en el área del hígado.
• Confusión mental.

Métodos para desintoxicar tu hígado

Muchos de los programas de desintoxicación te dicen que solamente tomes ciertos líquidos todo el día, que no consumas esto o aquello y que prácticamente vivas de aire. El problema es que a la larga, esto puede ser muy perjudicial para tu cuerpo. Antes de embarcarte en cualquier tipo de desintoxicación, necesitas consultarlo con tu médico y no hacerlo solo.

Mantén un peso estable y saludable

El sobrepeso y la obesidad sin duda contribuyen a un sinfín de problemas. En este caso, si tienes algunos o varios kilos de más podrías desarrollar hígado graso, por lo que debes procurar mantenerte en tu peso y no tener fluctuaciones tan altas del mismo.

Evita consumir demasiado alcohol

Tomar grandes cantidades de alcohol hace que se forme más grasa, incrementa la inflamación e incluso puede causarle heridas a tu hígado.

Toma suficiente agua

No hay mejor forma de desintoxicar tu cuerpo que con agua natural. Es la mejor manera de que tu cuerpo deseche todas las toxinas que no necesita; además, ayuda a la digestión y a absorber los nutrientes de la comida.

Haz ejercicio

Esta es otra forma excelente de mantener a tu cuerpo lejos de las toxinas. El ejercicio disminuye la inflamación, la cual es causante de muchas enfermedades. Además de eso, cuando sudas se liberan toxinas. Así que incluye por lo menos media hora de ejercicio en tu día.