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¿Cómo lograr que un bebé duerma tranquilo toda la noche?

Octubre 03, 2017

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Una de las cosas más complicadas de la paternidad es renunciar a las horas de sueño a las que estábamos acostumbrados. Cuando tenemos hijos damos por hecho que no volveremos a dormir bien, pero esto no es necesariamente cierto. Lo que ocurre es que, como buenos padres inexpertos, no sabemos enseñar a nuestros hijos a dormir (así es, a dormir también se aprende, no se trata de apagarse de agotamiento y ya) y podemos sentirnos muy frustrados cuando los acostamos para que duerman y responden llorando. Un bebé cansado al que no le han enseñado a dormir puede convertirse en una pesadilla ininterrumpida de llanto y estrés que, sumado a unos padres fatigados y frustrados, puede resultar en una bomba que acabe con el descanso de toda la familia.

 

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Con este sencillo ritual podrás enseñar a tu bebé a disfrutar la hora de dormir y, al mismo tiempo, garantizarte unas horas de sueño (que buena falta te hacen). Convierte una tarea que de inicio pareciera cansada y difícil en un momento de conexión y relajación para ambos. Recuerda que los bebés necesitan rutinas para sentirse cómodos y seguros, por lo que deberás realizar este ritual todos los días sin excepción más o menos a la misma hora. Ten paciencia; tu bebé está aprendiendo a adaptarse a este mundo y su sistema nervioso aún es inmaduro. Con el paso de los días, verás cómo tu esfuerzo da resultados.

 

Necesitarás

  • Una tina y jabón especial para bebé
  • Aceite de lavanda o manzanilla
  • Música relajante
  • Una lámpara de luz tenue o velas aromáticas

 

¿Qué hacer?

  • Primero que nada, tu bebé debe estar bien alimentado antes de iniciar el ritual. Un bebé hambriento no se relajará hasta que haya comido.
  • Prepara la tina con agua tibia y dale un baño muy suave; procura hablarle susurrando durante todo el baño para que su cerebro vaya bajando las revoluciones.
  • Sécalo y asegúrate de que no tenga frío; después comienza a masajear sus sienes, su cabecita, cuello y hombros con el aceite. Si el clima es adecuado puedes dejarlo solamente con el pañal; si no, ponle una camiseta y calcetines para que no se enfríe.
  • Después del masaje, baja las luces y pon la música relajante.
  • Puedes volver a alimentarlo si te lo pide; si no, mécelo al ritmo de la música hasta que se vaya quedando dormido.

 

Si lo vuelves una rutina, verás cómo a los pocos días tu bebé comienza a relajarse y a prepararse para dormir desde que lo bañas y, para cuando llegues a la música, ya estará prácticamente dormido. ¡Inténtalo!

 

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