Trabajar desde casa puede tener muchos beneficios si sabes administrar de forma correcta el tiempo y te comprometes con hábitos saludables que beneficien tu salud en diferentes aspectos. Un ejemplo claro está en la alimentación. 

Es cierto que el ritmo de vida actual a veces te impide ser estricto con horas de comida y tipos de alimentos, pero al estar en casa es mucho más fácil planear lo que comerás a lo largo del día: desayuno, comida y cena con sus respectivas colaciones. Y si lo haces bien, incluso hay tiempo suficiente para cocinar de forma rápida y sencilla los platillos correctos para una alimentación balanceada. 

A continuación encontrarás algunos de los mejores consejos de los expertos para que sepas por dónde empezar y así puedas aprovechar al máximo el lado positivo de no tener que salir de casa para trabajar. 

Un súper saludable

Todo comienza desde el momento en el que haces tus compras para la semana, así que la primera regla es no hacer el súper con hambre. Esto no solo evitará que te rindas ante el antojo de alimentos chatarra, sino que además podrás evitar gastar de más en cosas innecesarias. 

Para una alimentación balanceada, el cuerpo humano necesita más de 40 nutrientes que no se pueden obtener de un solo lugar, así que es muy importante que sepas cómo vas a combinar los alimentos, entre los cuales, los más importantes son las frutas y verduras. Se recomienda comer al menos cinco porciones al día de estos alimentos, ya sea en snacks o integrados en tus platillos. 

En Harmonía recientemente compartimos una lista con nutrientes esenciales para tener en cuenta al momento de armar tu despensa, así que te invitamos a echarle un vistazo para no olvidar los básicos. 

Respeta tus horarios

Al estar a unos pasos del refrigerador, es muy fácil caer en los antojos que desbalancean tu alimentación y rompen con tus horarios de comida. Peor aún cuando cada que asaltas la alacena es para comer cosas no nutritivas, pues cuando llega la hora de comer tu apetito se ha ido. 

Con la intención de mantener tu salud lo mejor posible, aunque la mayor parte de tus actividades sean en casa, intenta respetar tus horarios para cada comida con su respectiva colación, de la misma forma en la que lo harías en tu rutina cotidiana. 

También es importante que respetes los alimentos de cada momento del día. Evita cenar pesado o desayunar aquello que en teoría deberías dejar para la comida. Esto no sólo es con la intención de mantener tu peso sino, también de evitarle cambios agresivos a tu sistema digestivo. 

Deja listos tus snacks

Home office no es sinónimo de día libre, así que la administración de tu tiempo es muy importante, por eso es más fácil si optimizas tus actividades. Por ejemplo, dedicar un momento de tu día para preparar la mayor cantidad de alimentos posibles para la semana te ayudará a tener alimentos saludables disponibles. El tema de los snacks se presta muy bien para este hábito. 

Basta con media hora de tu tiempo para dejar fruta, semillas u otro tipo de colaciones en tu alacena o refrigerador, listas para sólo llegar a tomarlas cuando sea el momento de comerlas. Saber que tienes todo listo para apenas tomarlo y empezar a comerlo ayudará a que evites la tentación de consumir algo previamente empaquetado y menos saludable. 

Intenta hacer tu comida lo más atractiva posible

Otra forma de conseguir que la comida en casa sea incluso mejor que la que solías consumir fuera es que intentes que se vea igual de atractiva. No tienes que ser un experto en la cocina, simplemente dedícale el tiempo suficiente a preparar la mesa, quizás puedes poner música para crear un ambiente agradable, y también procura que la presentación de tus alimentos sea lo suficientemente llamativa para que puedas disfrutar al máximo ese momento en casa.

Si necesitas un poco de motivación extra, puedes aprender diferentes técnicas de cocina en internet y, por qué no, si tu tiempo lo permite hasta podrías inscribirte a un curso en línea. Quizás eres mejor cocinero de lo que tú mismo imaginas y sólo necesitas dedicarle unas horas de tu tiempo para descubrirlo. 

Igual de importante en este aspecto es que al preparar tu propia comida seas consciente de ingerir las cantidades correctas de cada alimento, para no tener que eliminar otros. A menudo sucede que las personas ya no quieren ensalada porque se llenaron con la carne o con una sola guarnición. 

En la medida en la que comas la ración adecuada de cada alimento, quedarás igual de satisfecho, pero con la mayor cantidad de nutrientes. Así que sírvete un plato equilibrado, con las cantidades que vayas a comer de cada cosa.

Beber suficiente agua 

Por último, pero no menos importante, recuerda que para beber agua no necesitas sentirte necesariamente deshidratado o acalorado. Beber agua todos los días es esencial para una buena alimentación y digestión. 

Al beber agua, aún sin sed, ayudas a tu cuerpo a reducir riesgos de problemas cardiacos; prevenir la formación de cálculos renales; lubricar tus articulaciones; disminuir las infecciones; mejorar el aspecto de la piel y muchos beneficios más. 

¡Vive mejor en casa! Pide tu súper en línea, ¡y recíbelo en tu puerta!  

¿Conoces los beneficios de trabajar en casa? ¡Descúbrelos aquí! 

Foto de portada de Paige Cody en Unsplash