Para mantener una buena salud digestiva es importante cuidar todos los detalles. Desde la forma en que comemos, que debe ser despacio y respirando con calma, hasta los alimentos que consumimos cuando vamos de compras. Para ello, toma en cuenta estos consejos la próxima vez que vayas al supermercado.
- Selecciona de manera informada lo que compras y consumes. Aprende lo que contienen los alimentos y adquiere el hábito de leer las etiquetas de los productos, así podrás elegir los mejores para ti.
- Recuerda estimular la biodiversidad de tu microbiota intestinal mediante el consumo de alimentos que contienen probióticos. Por ejemplo, compra un yoghurt para cada día.
- Elige alimentos de alto valor nutrimental que contengan vitaminas y minerales.
- Disminuye las calorías evitando el consumo de alimentos con alto contenido de grasa saturada y azúcares añadidos.
- Compra alimentos que puedan prepararse de manera sencilla. Por ejemplo, asados, cocidos, a la plancha, a la parrilla, al horno o empapelados. Evita alimentos que sólo puedas consumir fritos, capeados o empanizados.
- No olvides comprar oleaginosas como nueces, almendras, cacahuates y pistaches y consumir un puño de cualquiera de ellos una vez al día.
- Procura comprar suficiente verdura para que sea la mitad de todos tus platos. Selecciona vegetales de colores vivos: rojos, anaranjados, verdes, etc.
- Compra fruta que puedas consumir con cáscara para que tengas un mejor aporte de fibra.
- No olvides comprar agua simple. Es importante hidratarse adecuadamente y para ello la European Food Safety Authority (EFSA) recomienda mínimo 2 litros de agua al día para mujeres y 2.5 litros de agua al día para hombres. La recomendación puede aumentar si la persona es físicamente activa.
Recuerda combinar tus alimentos con ejercicio. Así será más sencillo mantener tu salud digestiva.