Es momento de cambiar tu actitud frente a los alimentos. Durante mucho tiempo has escuchado lo que es bueno y malo para tu salud, lo que ha hecho que los veas como los héroes o villanos, pero ¿cómo relacionarte mejor con la comida para disfrutarla y que no impacte negativamente en tu salud? Mereces disfrutar y aprovechar los nutrientes que la comida te da y con ello hacer elecciones más inteligentes. 

En una época en la que los estilos de vida son complicados (y muchas veces esa es la razón por la que no puedes tener una alimentación balanceada), es importante entender la relación que cada uno tiene con la comida. Para forjar una actitud sana hacia los alimentos, Matías Marchetti, nutriólogo especialista en salud familiar y deporte, invita a reflexionar: "la normalidad es una ilusión; lo que es normal para una araña es el caos para una mosca. Entonces sólo es cuestión de comprender los hábitos que nos hacen bien, para incluirlos en nuestra forma de vida".

Los males de la vida cotidiana

El estrés es enemigo de la salud, y mantenerlo a raya es importante. Para lograrlo, como menciona el especialista en nutrición, es indispensable tener una alimentación adecuada. La colitis es uno de los malestares más comunes y es necesario hacer adecuaciones en la dieta y estilo de vida para minorizar su impacto. Observa lo que comes y en qué momento lo haces, toma nota y prueba las siguientes recomendaciones:

• Identifica los alimentos que suelen provocarte molestias como mala digestión, gases o diarrea y evítalos o disminuye su consumo.

• Mantén una dieta baja en grasas e irritantes, ya que suelen dificultar la digestión.

• Incluye fibra en tu alimentación, al incrementar tu consumo de frutas y verduras.

• Modera tu consumo de café y bebidas gaseosas o carbonatadas, ya que favorecen el estreñimiento.

• Bebe muchos líquidos. Mantener una correcta hidratación favorece una mejor digestión y ablanda las heces para facilitar su eliminación, lo cual previene el estreñimiento.

• Consulta a un nutriólogo o gastroenterólogo que te ayude a planear tu dieta, de modo que cuentes con el aporte de los nutrientes adecuados.

El especialista recomienda también evitar los alimentos de hoja crudos, los condimentos, las salsas grasosas, las frituras, los enlatados, los embutidos, el chocolate, la leche y el alcohol. "Empieza el año con pequeños cambios de forma cotidiana, que te ayudarán a olvidarte de las molestias de la inflamación diaria de abdomen y la colitis". 

Junto a estos pequeños ajustes en tu dieta, prueba hacer un poco de ejercicio extra. No tienes que inscribirte a un gimnasio si no está entre tus planes, sólo camina 10 minutos, después 15, hasta lograr caminar más de 30 minutos diarios. Notarás una importante diferencia y eso te motivará a buscar más actividad física para mejorar tu vida en múltiples sentidos.

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