Si creciste en las décadas previas a los años 90 del siglo pasado, recordarás que se utilizaban mucho los envases retornables, sobre todo para bebidas como refrescos y cervezas, y que eran comunes las tiendas que vendían toda clase de productos a granel, desde alimentos hasta artículos para la limpieza del hogar.

Después, aunque los envases retornables no desaparecieron del todo y algunas marcas los han conservado, la mayoría de ellas cambiaron sus botellas por las que son desechables, de PET en la mayoría de los casos. Además, las pequeñas tiendas a granel comenzaron a escasear para dar paso a las grandes cadenas de supermercados y minisúpers, donde los empaques de los productos son desechables y la mayoría de ellos están hechos de plástico.

Todo esto ha impactado de manera negativa al medioambiente, ya que la contaminación ocasionada por el plástico es un problema que afecta el bienestar de los océanos y de los animales marinos y la salud del ser humano.

Por ello, cada vez se crea más conciencia acerca de reducir el uso de plásticos desechables, y así han surgido iniciativas y leyes que buscan evitar productos como popotes y bolsas de plástico.

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Además, ahora existe una coalición de grandes marcas que suman esfuerzos en Loop, una plataforma zero waste (cero basura) que busca transformar la manera en que se compran diversos productos.

Loop se encargará de enviar productos de marca, como detergente Tide, enjuague bucal Crest, champús y acondicionadores Pantene, limpiadores Clorox, mayonesa Hellmann’s, desodorantes y antitranspirantes de marcas como Dove, Rexona y Axe, así como el helado Häagen Dazs. La gran diferencia es que al adquirir los productos en esta plataforma, cuando éstos se terminen, las personas podrán devolver el envase vacío, para que se lave y sea reutilizado. 

Se prevé que la tienda en línea comience a funcionar esta primavera, inicialmente en las principales ciudades de Estados Unidos y Francia, donde los clientes recibirán sus productos en envases hechos de materiales reutilizables, como el acero inoxidable, para que en lugar de tirarlos a la basura, los coloquen en un contenedor especial (que también es enviado y posteriormente recolectado por Loop) para devolverlos a un centro de limpieza y esterilización, para que puedan ser reutilizados al rellenarlos con más producto.

"Si bien el reciclaje es de vital importancia, no solucionará de raíz el problema de la contaminación por desechos no degradables", explica mediante un comunicado Tom Szaky, CEO y cofundador de TerraCycle, una empresa conocida por reciclar materiales difíciles de reciclar, y uno de los socios detrás el proyecto de Loop.

"Cada día, más y más desechos de plástico se vierten en los mares, así que no importa cuánto limpiemos el océano, nunca vamos a resolver el problema. Ahí es donde realmente surgió Loop", dice Szaky. "Para nosotros, la causa principal de los residuos no es el plástico per se, sino que la mayor parte de los objetos hechos con este material se usan sólo una vez, y eso es realmente lo que Loop intenta cambiar lo más posible", agrega.

TerraCycle trabajó durante más de 1 año con compañías como Procter & Gamble, Nestlé, PepsiCo y Unilever, entre otras, para desarrollar la nueva plataforma. Como resultado del esfuerzo conjunto, cada envase y empaque que distribuirá Loop está diseñado para tener al menos 100 usos. 

En el lanzamiento inicial, los productos estarán disponibles a través de la tienda en línea de Loop. Cuando un cliente ordene, por ejemplo, desodorante o enjuague bucal, pagará un depósito por el envase. 

Los productos llegarán en un contenedor reutilizable y diseñado por ingenieros de UPS para soportar viajes repetidos, en lugar de en una caja de cartón que podría dañarse o romperse fácilmente tras unos cuantos usos. 

A medida que el usuario termine de usar sus productos, deberá colocar los envases vacíos en dicho contenedor y cuando esté lleno, puede ir al sitio web de Loop para solicitar su recolección (o, si lo prefiere, puede dejarlo en una sucursal de UPS, que es una compañía asociada al proyecto).

Además del depósito reembolsable en el paquete, el costo de los productos será similar al que pagan los clientes por los productos en las tiendas, mientras que algunos envíos serán gratuitos, según el monto de la compra y el peso de los productos. 

Cuando se devuelve un envase, el cliente recupera su depósito (o si optó por una suscripción automática, la recepción del contenedor puede generar un nuevo pedido). Los paquetes vacíos van a una instalación para ser limpiados y luego se envían a los fabricantes para que los vuelvan a llenar. 

Todo este proceso de envío y recolección tiene una huella de carbono, pero cuando TerraCycle calculó el impacto total del embalaje, descubrieron que es entre un 50% y un 75% mejor para el medioambiente que las alternativas convencionales.

Con información de Fast Company