Quienes tienen perros en casa, saben que cuidar su salud y bienestar de manera integral es primordial. Es necesario alimentarlos, jugar con ellos, sacarlos a pasear, llevarlos al veterinario para una revisión general y aplicarles sus vacunas en tiempo y forma, pero eso es sólo lo básico. 

Parte de la higiene necesaria y los cuidados más frecuentes es su salud bucal. Según datos de FullTrust, la marca de alimento prémium para perros, entre los problemas más comunes en la edad adulta de un perro están el sarro dental y la gingivitis, pues a los 3 años de edad, el 91% de ellos presentan algún signo de enfermedad oral. La prevención y detección de estos padecimientos son muy importantes para garantizarle a los animales de compañía una mejor calidad de vida.

El cepillado dental canino

• El cepillo y la pasta dental deben ser especiales. Según los expertos, es importante que el cepillado dental en los perros se lleve a cabo con productos destinados específicamente para mascotas, que incluso contengan sabores de su agrado. No es recomendable utilizar productos de uso humano, porque pueden contener ingredientes que, de ingerirlos, pueden perjudicarlos.
   
• La paciencia es la clave. Si tu perro nunca ha recibido un cepillado dental, nunca es tarde para empezar, pero es muy importante que tengas paciencia, pues esta actividad puede ser un poco complicada de inicio. Sin embargo, buscar un lugar tranquilo y relajado, así como regalarle un ligero masaje antes de empezar, ayudará a que la limpieza sea menos estresante. Ya verás cómo, poco a poco, las sesiones serán más exitosas.
   
• Pasito a pasito. Comenzar de manera gradual y delicada puede ser una buena opción para que se acostumbre  al cepillado de dientes. Humedece el cepillo, permite que olfatee y pruebe la pasta de dientes para familiarizarlo, y evita que los primeros cepillados sean prolongados, será mucho más sencillo lograr este hábito pronto si las primeras sesiones son breves. Recuerda premiarlo al finalizar la limpieza bucal, para que entienda que permitir el cepillado es una buena acción.
   
• Cepillado estratégico. No es recomendable comenzar con los dientes incisivos de la parte frontal de la boca pues, al ser una zona más sensible, es probable que tu perro se resista más a la limpieza ahí. Para comenzar con este hábito levanta el labio de tu mascota y cepilla los dientes caninos, de ahí sigue con los frontales para pasar a los que están más atrás y al final cepillar los molares.
   
• Cepilla primero los dientes superiores y luego deja que la boca se abra ligeramente para poder cepillar a lo largo de la línea de las encías de los dientes inferiores. Puedes jugar con diferentes tamaños de cepillos para facilitar el acceso a todas las zonas de la boca. Todo esto con movimientos circulares por dientes y encías.
   
• Hazlo por lo menos una vez a la semana. El cepillado de la dentadura del fiel amigo debe realizarse en casa, preferentemente todos los días, pero como mínimo una vez por semana.
   
• Limpieza dental anual. Recuerda que, independientemente de tus cuidados, debes llevar a tu mascota a una limpieza dental profesional al menos una vez al año. En estas sesiones, el veterinario evaluará la salud oral general de tu perro y ayudará en la prevención de la acumulación de placa, gingivitis o enfermedad gingival y otras afecciones que pueden causar padecimientos más graves, como insuficiencias sistémicas y enfermedad cardiaca.

Además, es importante recordar que la alimentación apropiada ayudará a prevenir enfermedades bucodentales en tu perro. En ese sentido, proporcionarle un alimento 100% completo, balanceado y que contenga microcristales de limpieza como el hexametafosfato de sodio, apoyará a disminuir la formación de sarro dental. 

Al conocer y reconocer la importancia del bienestar y la salud de tu mascota en todos los niveles la ayudarás a cuidar desde su salud gastrointestinal hasta bucodental, con lo que garantizráas una buena calidad de vida y, sobre todo, mayor longevidad.

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