Están en casi todos tus productos cosméticos y son una de las mayores amenazas para los ecosistemas marinos, sí, nos referimos a las llamadas microesferas. Estos minúsculos pedacitos de plástico (miden aproximadamente 0.5 milímetros) fueron diseñados para utilizarse para realizar pruebas de laboratorio debido a que, gracias a su tamaño, son capaces de penetrar en cualquier parte, por lo que se volvieron muy útiles para separar sólidos y realizar pruebas tanto de cáncer como de VIH, en la actualidad se utilizan incluso en las pruebas de embarazo.

Pero el que las microesferas faciliten algunas investigaciones no vuelve su uso algo bueno o positivo ya que, al tratarse de microplásticos no biodegradables tarde o temprano van a parar al mar en donde causan grandes estragos a las plantas y animales.

Por si fuera poco, la industria cosmética ha decidido añadirlas a una numerosa cantidad de productos, principalmente jabones, exfoliantes y pastas dentales. ¿Has notado unas simpáticas bolitas azules en tu cepillo de dientes? ¿Sabes que son esos granitos que se frotan contra tu piel cada vez que te exfolias? Los productos que contienen microesferas están hechos para eliminarse a través de los desagües, lo que facilita la llegada de los plásticos al mar donde ya se acumulan por toneladas. 

El principal problema que ocasionan las microesferas es que al ser ingeridas por peces y otros animales marinos se acumulan en su interior provocando su muerte por obstrucción de órganos vitales. Además de contribuir al gran problema de contaminación plástica que afecta los océanos. Un sólo producto, como exfoliante o pasta dental, puede contener hasta 100, 000 microesferas de plástico. Si sumamos la cantidad de estos productos que se utilizan alrededor del mundo en tan sólo una semana podemos darnos una idea de la magnitud del problema.

Muchos países están comenzando a prohibir el uso de microesferas en la industria cosmética, sin embargo, en México aún no se han promovido iniciativas al respecto. Es nuestra responsabilidad como consumidores evitar los productos que las contengan. Muchas veces no se encuentran indicadas en la etiqueta, por eso, cada vez que compres un producto como jabón o pasta dental, revisa que en la lista de ingredientes no aparezcan las palabras polietileno (PE), polipropileno (PP), tereftalato de polietileno (PET), polimetacrilato de metilo (PMMA) o nylon. Y, si es posible, sustituye las marcas de cosméticos comerciales por una opción naturista que sea menos agresiva con el medio ambiente.

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